“Escuchá…, escuchá…” – Rubén Daniel Roude – Argentina - 2022
Escuchá…, escuchá…
Era atardecer del día de navidad, me encontraba mateando en
el patio de mi casa mirando pájaros, el jardín y recordando cosas que sin
llamarlas venían a mi memoria.
Era un día especial éste donde la sensibilidad está a flor
de piel. Será por ello que recordé algo que me contó mi madre o porque escuché
el arrullo de palomas en el aguaribay que me da sombra. Se trata de una
situación que vivió cuando ella era joven.
Me contó que tenía de vecinos a una familia muy pobre,
indigentes, realmente no tenían a veces para darles de comer a sus cinco hijos.
Prácticamente vivían de la caridad de la gente, el hombre de la casa hacía
changas de lo que sea, la esposa lavaba a mano para otros y atendía su prole.
La pobreza arreciaba en el país.
Cuando alguno de nosotros, yo y mis hermanos, no queríamos
comer algo porque no nos gustaba, nos reprendía con la frase que escuchaba
decir a la pobre mujer. Mamá lo decía con pena, lo sufría ella también.
Arrullaban las palomas en los árboles y los niños reclamaban
algo para comer, acongojada esa madre por no tener ni una migaja para darles
les decía: “Escuchá las palomas, escuchá, escuchá como hacen, cruuu, cruuu,
escuchá, escuchá…”