¿Dónde guardo mis recuerdos?
Yo guardo mis recuerdos en la ramazón de los árboles.
No es un lugar común pero creo que es el más apropiado porque tienen algo de maternal, los acunan como lo hacían conmigo sentado en sus ramas, sostuvieron los nidos donde empollaron ilusiones y sacudieron veleidades a ramalazos en días tormentosos.
Tienen eso de relicario en maderas, sabias y trinos.
¿Qué otro lugar mejor puede ponerle música, darle la dulzura de frutas maduras, vestirlos de colores con suavidad de plumas?
¿Quién mejor demuestra con la mudanza de otoño que no debo permanecer aferrado a lo viejo y con la primavera florecer lo nuevo?
Solo que a veces, cuando llueve, cada hoja gotea algunos de ellos.